El mundo cae a pedazos. Y ellos también. Kate Harker no teme a los monstruos. Los caza. Y lo hace muy bien. August Flynn alguna vez tuvo el anhelo de ser humano. Pero ya no. Tiene un papel que cumplir. Y va a cumplirlo, cueste lo que cueste. EMPEZÓ LA GUERRA. LOS MONSTRUOS ESTÁN GANANDO. Kate tendrá que regresar a Verity. August tendrá que dejarla entrar otra vez. Y un nuevo monstruo espera... un monstruo que se alimenta del caos y que hace aflorar los demonios internos de sus víctimas. ¿Cuáles serán más difíciles vencer: los monstruos contra los que pelean, o sus monstruos internos?
Bueno. He llegado al final de la historia y puedo decir me gustó mucho el camino recorrido.
Ambos libros tienen atmósferas muy diferentes. El primero es obviamente introductorio a los personajes, al mundo y nos sitúa en sus miedos, sus creencias y la situación con la cual convive cada uno.
Creo que el segundo pierde un poco ritmo respecto al primero, pero no deja de ser genial la forma en la que la autora nos muestra que los personajes principales pueden seguir creciendo y enfrentando sus demonios (tanto internos como externos). Admito que me esperaba la forma en que iba a terminar, pero aún así sentí lágrimas en los ojos porque, bueno, los finales me hacen eso.
El único problema, uno insignificante pero igual de importante, es que siento que dos situaciones en particular se solucionaron muy rápido y muy convenientemente, funcionando así para el final correcto de la historia. Respeto que se hayan tomado las decisiones que sucedieron, porque creo que yo habría hecho lo mismo; funcionaba y, al final del día, siempre podemos imaginar lo que habría ocurrido si no hubiera sucedido lo que pasó, los que lo leyeron ya saben de qué estoy hablando.
Ambos libros tienen atmósferas muy diferentes. El primero es obviamente introductorio a los personajes, al mundo y nos sitúa en sus miedos, sus creencias y la situación con la cual convive cada uno.
Creo que el segundo pierde un poco ritmo respecto al primero, pero no deja de ser genial la forma en la que la autora nos muestra que los personajes principales pueden seguir creciendo y enfrentando sus demonios (tanto internos como externos). Admito que me esperaba la forma en que iba a terminar, pero aún así sentí lágrimas en los ojos porque, bueno, los finales me hacen eso.
El único problema, uno insignificante pero igual de importante, es que siento que dos situaciones en particular se solucionaron muy rápido y muy convenientemente, funcionando así para el final correcto de la historia. Respeto que se hayan tomado las decisiones que sucedieron, porque creo que yo habría hecho lo mismo; funcionaba y, al final del día, siempre podemos imaginar lo que habría ocurrido si no hubiera sucedido lo que pasó, los que lo leyeron ya saben de qué estoy hablando.
En fin, me pareció una bilogía muy bien trabajada, con un concepto utilizado anteriormente (no por la misma autora) pero presentado de forma impecable, con su estilo propio. Todo los libros pueden tener defectos, y estos solo tuvieron unos pocos. Es una lectura ligera de principio a fin y estoy segura de que van a disfrutar el segundo libro tanto como el primero.
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| Puntuación real: 4,75 |
Muchas gracias por leer.
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