jueves, 14 de septiembre de 2017

Escritura Expresiva #12: momento de hablar


"Mis respiraciones parecen artificiales, como si no fueran mías, como si la que viviera en este cuerpo no fuera yo en absoluto.Si hay una salida, por favor, muéstramela."

Sip, ese es un pequeño (pequeño, pequeñísimo) fragmento de mi novela. ¿Sorprendidos de que finalmente estoy mostrándoles algo? No creo que sea lo más original que se me pudo hacer ocurrido, pero resulta que eso es lo último que escribí de mi novela antes de abandonarla hace dos días. Pude escribir un par de capítulos y luego BAM, se acabo todo para mí. 
No es algo extraño que eso pase, pero cuando pasa, simplemente me fuerzo a seguir y seguir, solo para ver si puedo salir de ese abismo interno y sobrepasar las barreras del bloqueo. 
Es posible. No funciona para todo el mundo, pero es posible. 
Hay veces que me funciona más que otras pero, sin ponernos demasiado dramáticos, voy a seguir de a poco, solo para ver si de verdad necesito escribir tanto o si solo estoy haciendo un berrinche por nada. 
Así que hablemos. O escribamos si quieren. 
Me la he pasado escribiendo historias cortas, porque parece ser lo único que me llega a la cabeza en estas últimas semanas y, después de pensar mucho en todo y en nada al mismo tiempo (y de escuchar mucha música clásica) he llegado a la conclusión de que me siento más cómoda haciendo eso: escribir relatos. 
Me encanta la facilidad con que imagenes o historias que no necesariamente tienen que convertirse en libros pueden llamarme mucho a escribir y mucho mejor si son historias de terror. 
Me encantan esas.
Pero eso no significa que no me guste escribir novelas.
Me encanta poder crear sin limites y llegar a lugares que no pensé que podía llegar, además de poder expandirme no solo como escritora sino también como persona.
Supongo que no debo ser la única que se ha encontrado un poco más consigo mismo mientras hace lo que le gusta o descubre algo nuevo sobre su persona. Es el mejor sentimiento del mundo.
Entonces, momento de hablar seriamente.
Estoy lista.
Estoy lista para poder terminar ese libro y comenzar el tercero.
Estoy lista para ir de lleno a descubrir nuevas cosas, descubrir que otros mundos se esconden dentro de mi mente.
Y si no funciona, entonces está bien. Lo sabemos, lo aprendimos, lo seguimos aprendiendo siempre.
Estamos listos para seguir adelante.

***

¡Muchas gracias por leerme!

Sofía 

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